Seamos sinceros: las verduras no siempre son el plato más apetitoso a la hora de elegir qué comer.
Por eso, nosotros sabemos cómo darle una vuelta de tuerca a las comidas para que queden deliciosas.
Mirá cómo podés comer unas riquísimas espinacas con un toque extra de sabor.
Los ingredientes son:
3 atados de espinaca, hervidas y picadas.
Queso rallado
Sal
Nuez moscada
Para la salsa blanca:
½ litro de leche
2 cucharadas de harina o fécula de maíz
50g de manteca
Primero, prepará la salsa blanca en una cacerola mezclando la harina y agregando la leche de a poco. Siempre procurá revolver con una cuchara de madera para que no se hagan grumos.
Incorporá la manteca y llevá toda la mezcla a fuego moderado. Revolvé continuamente hasta que rompa el hervor y espese.
Condimentá con sal y nuez moscada a gusto.
A continuación, colocá las espinacas en una fuente para horno y volcá encima la salsa blanca. Espolvoreá con queso rallado y llevá la fuente al horno hasta que quede todo bien gratinado.
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